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¿Cómo rodear a Díaz para sorprender a Alemania? Opciones de Lorenzo

La Selección Colombia enfrenta este martes a Alemania, en su segundo partido amistoso de la gira europea por la fecha FIFA, tal vez el más grande desafío en la era Néstor Lorenzo.

El argentino marcha invicto y eso le ha permitido trabajar sin la presión de la crítica. Si bien se le ha reconocido la transición de los históricos a las nuevas figuras y la habilidad para replantear los partidos con los mismos jugadores en los descansos, también se dice que entrega un tiempo y eso, contra un rival de la categoría de Alemania, puede pasar factura.

Las sensaciones contra Irak (triunfo 1-0) no fueron las mejores pues, aunque se corrigió en defensa y se sacó el arco en cero, en ataque el equipo se repitió, se estrelló muchas veces contra los mismos obstáculos y solo con los suplentes logró hacer un gol. 

La pregunta obligada viene por la gran figura del equipo, que vuelve de lesión: ¿cómo rodear mejor a Luis Díaz para que tenga el peso ofensivo que sí explota en Liverpool?

​Lo primero que hay que reconocer es que el guajiro, en términos estadísticos, no lo hizo mal: tres buenos pases largos de tres intentados, 4 de 5 regates efectivos y 8 de 12 duelos ganados hablan de su compromiso. El problema es que en 74 minutos no tuvo ocasiones claras de gol y ese sigue siendo un lío sin solución. 

Pero hay un atenuante: Díaz estuvo en los amistosos contra Guatemala (4-1) y México (3-2) y no se reportó en el marcador, después vinieron la lesión (en octubre) y los seis meses de recuperación en Liverpool y desapareció del radar hasta esta convocatoria. Estaba de vacaciones y aún no ha hecho una pretemporada que se antoja definitiva para consolidar su regreso. Eso explica, en parte, que no sea gravitante.

En todo caso, es urgente encontrarle socios ahora, a tres meses de las Eliminatorias y ese es el gran reto pendiente de Lorenzo. 

Contra Irak hubo un ensayo interesantes y es que, en el papel, salió de su banda izquierda habitual para acompañar en ataque, en un doble 9, a Santos Borré. Su movimiento natural lo lleva a la banda pero él suele interiorizar el juego, con lo cual necesita un lateral que le pase por la espalda y le sirva de apoyo, un delantero centro con movilidad para salir del área y abrirle espacios y un mediocampista que le cubra la espalda y le ubique pases limpios hacia adelante para aprovechar su velocidad.

En teoría, lo que quería Lorenzo es que Salazar, Borré y Cuadrado cumplieran esa misión, pero no fue tan así: el juvenil lo hizo mejor en defensa que en ataque, el mediocampista, que en este módulo era el hombre de Juventus, perdió efectividad tan lejos de la puerta y Borré intentó abrirle espacios pero no llegó a generarle ocasiones claras de frente al arco.

​Contra Alemania, si bien hay que asegurar el medio, podría usar a un Déiver Machado más punzante en la salida por la banda izquierda; recuperar a Uribe como ese socio en el medio, pues ya el nuevo jugador de Al-Sada de Catar lo hizo bien en la gira asiática; y darle un jugador referente arriba como Borré, no porque sea deslumbrante sino porque se conocen y aparte la única opción adicional sería Casierra, quien apenas tiene su primera convocatoria y no tiene tan claros los movimientos.

La misión es darle a Díaz un Salah, un Robertson, un Thiago, es decir un cuerpo de escoltas que cubra sus desplazamientos y le quite sacrificios defensivos que ha venido haciendo, de puro comprometido, pero que merman su físico en este regreso de una ausencia tan larga. Es el hombre a potenciar. Es el misterio que hay que descifrar cuanto antes.

FUENTE FUTBOL RED