Colombia hizo historia: desde hoy es legal abortar hasta los 6 meses

El país quedó entre los 5 más flexibles del mundo para acceder a ese derecho. La Corte Constitucional tomó la decisión con 5 votos a favor y 4 en contra.

En una decisión histórica y sin precedentes en Latinoamérica, la Corte Constitucional decidió despenalizar el aborto hasta la semana 24 y posicionó a Colombia como uno de los cinco países en el mundo que más ha flexibilizado sus leyes para acceder a ese derecho.

La nación que menos restricciones tiene a nivel mundial es Canadá, donde la interrupción voluntaria del embarazo es legal y gratuita sin límite de tiempo desde 1988. Luego le siguen Inglaterra, Gales y Escocia, en donde se puede terminar el embarazo hasta la semana 24, igual que en Colombia.

Tras la decisión que le tardó a la corte 523 días de proceso y siete horas y media de debate, el país queda a la altura de Reino Unido y supera por más de diez semanas a los países de América Latina que más habían logrado avanzar en el tema: Argentina, en donde se despenalizó hasta la semana 14, y México, que lo permite hasta la semana 12.

Pero el debate no ha sido fácil incluso para naciones más vanguardistas como Francia (12 semanas), España (12), Alemania (12), Australia (22), Bélgica (22) y Portugal (10), que han tardado décadas legislando sobre el tema y, aún así, no han decidido ir hasta el punto que avaló este viernes Colombia.

Y aquí tampoco no ha sido diferente. Con una votación 5-4 y tras solucionar decenas de recusaciones en contra de magistrados y conjueces, esa decisión sin precedentes para la historia de la región quedó en las manos de Julio Andrés Ossa, un conjuez de tendencia liberal que fue pieza clave en el fallo, no solo porque inclinó la balanza a favor de la despenalización, sino porque propuso el modelo de protección incremental que quedó como ley ante la votación final de este lunes.

La nueva legislación

En la práctica, la norma aplica a partir del momento en que la Corte hace pública la decisión. Ese punto quedó claro en el reciente debate sobre la eutanasia con el que el alto tribunal le contestó al Gobierno –el pasado 3 de diciembre– que sus decisiones no tienen que esperar regulación o nada por el estilo para entrar en rigor.

Por eso, desde este martes cualquier persona gestante que desee interrumpir su embarazo puede hacerlo con plazo máximo de seis meses, que fue lo que falló la Corte, pero tendrá una gabela más a partir de ese período.

Según detalló esa máxima autoridad, una vez se cumplan las 24 semanas seguirán aplicando las tres causales que ya habían sido aprobadas en el país mediante la sentencia C-355 de 2006, el avance más importante en el tema que había presentado el país.

Esos tres opciones adicionales para quien haya superado el límite de tiempo se pueden apelar solo en tres escenarios: cuando el embarazo haya sido fruto de una violación o de incesto, cuando el feto venga con malformaciones genéticas graves o cuando la vida de la madre esté en peligro. Bajo esta última, según información de la Fiscalía, era bajo la que más abortos se realizaban, pues las mujeres aseguraban que la inestabilidad emocional de recibir un hijo para el que no se estaba preparada podía afectar gravemente la salud de la progenitora.

Según ese mismo ente de control, en un lapso de 13 años han sido condenadas 346 mujeres por incurrir en el delito del aborto, el cual aún está estipulado en el artículo 122 del Código Penal. El Gobierno y el Congreso deberán desarrollar una política pública que proteja a las mujeres y a las madres gestantes que quieran acceder a este derecho, un reto que vendrá para el legislativo y que dependerá, en buena parte, de los congresistas que terminen elegidos el 13 de marzo de 2022.

De ese total de mujeres condenadas con corte a 2020, un total de 85 son menores de edad y, en su mayoría, se enfrentaron a condenas entre 1 y 3 años de prisión.

¿Y la salud?

El detalle de las semanas modifica los métodos médicos a los que se deben someter las mujeres y preocupa a quienes están en contra de la práctica por el detalle obvio de que cada día estará más desarrollado el feto.

En diálogo con EL COLOMBIANO, Carlos Alberto Ramírez –secretario de la Federación Colombiana de Obstetricia y Ginecología–, detalló que a partir de la semana 13 ya hay un cambio en los métodos de la interrupción voluntaria del embarazo porque se pasa de implementar medicamentos abortivos a intervenciones de más complejidad. A medida que avance el embarazo, el personal médico puede recurrir a legrados o cirugías de mayor nivel y, por ende, se incrementa el riesgo de la mujer.

Pero Ramírez fue claro en detallar que siempre será “mejor” tener acceso a los servicios de salud regulados que tener “abortos ilegales”, pues con ahí el aborto pasa de ser un procedimiento médico con bajo o medio riesgo a ser de riesgo extremo.

FUENTE EL COLOMBIANO