Manantial Radio
Nacional

“El hueco fiscal de no producir petróleo existirá con o sin transición energética”

En entrevista, Antonio Hill, asesor del Natural Resource Governance Institute en temas de transición energética justa, explica los retos que tendrán los próximos gobiernos de Colombia. Lo más urgente, señal, es crear una estrategia para salir del carbón.

Uno de los temas claves que deberá liderar el presidente electo, Gustavo Petro, así como los gobiernos que tendrá Colombia de aquí a 2050, será impulsar la transición energética: un proceso que va más allá de diversificar la matriz energética con proyectos renovables, y que, en cambio, implica diversificar la economía y apoyar a las comunidades dependientes de los combustibles fósiles. (Lea: Colombia lanzó propuesta de transición energética, ¿pero a punta de gas y carbón?)

El Espectador habló con Antonio Hill, asesor del Natural Resource Governance Institute en temas de transición energética justa. El investigador español es experto en justicia climática y medioambiental, desarrollo social, reducción de la pobreza y desarrollo internacional.

En general, ¿cómo ve el panorama de la transición energética en Colombia?

Bueno, sabemos que actualmente se están desarrollando cuatro nuevas carboeléctricas y que hay 40 propuestas más sobre la mesa. Y a estas alturas es casi imposible armar un argumento de que el carbón es la mejor solución. Si Colombia quiere demostrar que está tomando en serio la transición energética, debe tener una estrategia para salir del carbón lo antes posible, eso es lo primero. Ahora, hay que reconocer que se han dado avances importantes en energías renovables y, en ese sentido, sí tiene una posición de liderazgo, junto a Chile, en la región, aunque no a escala global.

Salir del carbón, lo dice usted, y de hecho se dijo durante la COP26, es lo más urgente. Pero también hay reportes, como el del Centro Tyndall para la Investigación del Cambio Climático, de la Universidad de Manchester, que ha dicho que países desarrollados y en desarrollo tienen distintos tiempos para hacerlo. ¿Qué debe hacer Colombia?

Sí, el primer paso es el carbón, y es urgente empezar desde ya, pero en el país hay mucha ambivalencia: no hay un movimiento claro desde el Gobierno Nacional para querer hacerlo y los gremios de carbón lo siguen impulsando. Pero si hablamos de un período de lo que pasará en 15 años, para ser consecuentes con un abordaje coherente con el punto de vista científico y a nivel global, Colombia ya debería definir este rumbo, lo que no está pasando. La transición energética del país, como en todos, debe tener tres partes. Una es asegurar y garantizar el acceso a la energía, y en Colombia no hay cobertura total para la electricidad. Lo segundo es la diversificación económica, que es fundamental, en especial para los departamentos que dependen mucho del carbón. A un plazo de 10 o 15 años hay que garantizar que el país entero, así como esos departamentos, no dependan del extractivismo. Y tercero, hay que ponerles atención a las comunidades que dependen de estos sectores, como las poblaciones de Cesar y La Guajira: que tanto ellas como los trabajadores tengan un apoyo para poder hacer la transición.

FUENTE EL ESPECTADOR