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Internacional

Rusia puso 36 satélites en órbita para brindar internet de alta velocidad en cualquier parte del mundo

Fueron lanzados en el cohete Soyuz-2.1b y se estima que para 2022 se establezca una red de internet satelital gracias al conjunto de 650 satélites.

Rusia puso en órbita 36 nuevos satélites en el espacio del operador británico de comunicaciones globales OneWeb, que está desplegando una constelación para brindar internet de alta velocidad en cualquier parte del mundo.

OneWeb, propiedad del gobierno británico en asociación con la multinacional india Bharti, prevé una red de internet global operativa a finales de 2022 gracias a una constelación de 650 satélites en órbita.

En esta ocasión lanzó 36 satélites a la órbita en el cohete Soyuz-2.1b, que despegó con éxito a las 1:14 de Moscú desde el cosmódromo ruso Vostochni en el Lejano Oriente, confirmó la agencia espacial rusa Roscosmos en un comunicado.

“Todos los satélites se han colocado con éxito en las órbitas elegidas y están bajo control del cliente”, añadió la agencia.

A lo largo de 2019 y 2020 se han presentado otros lanzamientos, y en lo que lleva del 2021 se conoce que este sería el segundo lanzamiento de satélites OneWeb, pues el anterior tuvo lugar el 25 de marzo con 36 satélites colocados en órbita.

Según un contrato con la empresa europea Arianespace confirmado en septiembre de 2020, 16 lanzamientos de Soyuz, entre diciembre de 2020 y finales de 2022, terminarán de instalar la constelación de satélites de OneWeb.

Actualmente existen varios proyectos de constelaciones de satélites para proporcionar una red de internet global.

El multimillonario estadounidense Elon Musk, jefe de la empresa espacial SpaceX, ya ha puesto en órbita a tal efecto mil satélites para crear la red Starlink, y el fundador de Amazon, Jeff Bezos, tiene un proyecto similar llamado Kuiper.

El lanzamiento del lunes tuvo lugar desde el cosmódromo de Vostochni, cuya construcción en Rusia se ha visto salpicada de innumerables escándalos de corrupción y retrasos.

Ubicada en el Lejano Oriente, cerca de la frontera con China, esta base de lanzamiento reemplazará en el futuro a la de Baikonur que Moscú alquiló a Kazajistán desde la caída de la Unión Soviética en 1991.

FUENTE RCN