“Plan b va andando, no vamos a esperar hasta diciembre”: Carrillo
En Hidroituango variarían los tiempos de entrega con el cambio de contratista.
El panorama de Hidroituango no está nada claro: cada día está más cerca el 31 de diciembre y no se sabe qué ocurrirá con el consorcio constructor, pues podría terminar por fuera del proyecto si la Contraloría ratifica en segunda instancia su condena o si EPM decide no esperar y activa su plan b, que incluiría el cambio de firma constructora.
A la tormenta se suma el fallo en contra del nombramiento del gerente general, Jorge Carrillo, porque cuando fue nombrado era miembro de la junta directiva de EPM, lo que va en contra del Decreto Ley 128 de 1976, que exige esperar un año por fuera.
EL COLOMBIANO habló con Carrillo sobre el futuro de Hidroituango.
¿Va a impugnar el fallo que lo tumba de su cargo?
“Soy absolutamente respetuoso de las decisiones judiciales. El análisis no se hizo ayer, se hizo cuando me designaron. Y está soportado en los conceptos más recientes del Consejo de Estado y de la Función Pública. Nosotros aspiramos a que, por coherencia, se revoque la decisión en el Consejo de Estado y se permita que yo continúe”.
En diciembre se vence el contrato de EPM con el consorcio constructor de Hidroituango, ¿qué va a pasar?
“Aquí hay varios escenarios, el primero es que no salga el fallo de segunda instancia de la Contraloría o que se revoque la decisión de la Contraloría que ya conocemos en primera instancia, en ese caso el Consorcio CCC seguiría siendo un contratista habilitado y nosotros le daríamos continuidad”.
¿Esa es una decisión ya tomada?
“Es lo que más le conviene el proyecto en ausencia del fallo. Ahora, si el fallo se confirmara en la segunda instancia, nosotros estaríamos obligados por ley a buscar dos caminos. El primer camino es que el consorcio CCC proponga cesionarios, ellos buscarían a un contratista equis y a EPM le correspondería verificar que sí tenga las condiciones y capacidades para continuar con un proyecto de esta envergadura. Dentro de ese plan, la otra opción del consorcio sería renunciar directamente”.
¿Y qué pasa si la Contraloría no falla antes de diciembre?
Nosotros estamos estudiando cuánto dura la Contraloría, en promedio, entre la primera y la segunda instancia con un fallo de esta complejidad”.
¿El fallo podría demorarse hasta el otro año?
“Nosotros no tenemos esa visión. Los recursos jurídicos ya se presentaron. Nosotros nos venimos preparando, pero todo depende del tiempo, y con el respeto que le tenemos a la Contraloría en su autonomía, no podemos exigirle ni preguntarle cuando va a salir el fallo, eso no lo sabe nadie, y por eso tenemos un plan b para que pueda llegar un contratista en reserva o un contratista nuevo y terminar el proyecto”.
¿En poco menos de tres meses, que es lo que queda para el 31 de diciembre, alcanzaría EPM a cambiar de constructores o a ceder el contrato sin que eso perturbe el avance del proyecto?
“La cesión es un efecto del fallo, no es anticipándose al fallo”.
¿Entonces en el plan b, del cual ustedes han hablado, cómo funcionan los tiempos?
“Nosotros no vamos a esperar hasta diciembre para tomar la decisión. El plan b va andando, pero no se ha activado contractualmente. Estamos mirando si hay compañías capaces de ejecutar el proyecto en la etapa en la que está. Después necesitamos ver si tienen el interés. Y, en tercer lugar, que sea en condiciones de precio favorables y que la transición sea lo más rápido posible. Una vez tomemos la decisión de cuál camino adoptar, iniciaríamos las fases contractuales que en este momento son.
FUENTE EL COLOMBIANO